Efecto Matrioska
Hace ya días que no paro de darle vueltas a un tema: el pensamiento. ¿Por qué los hombres y las mujeres piensan diferente? Las mujeres somos mucho más complicadas que los hombres, por lo que ellos son más simples. ¿No?
Según Mark Gungor: " El cerebro del hombre es diferente. La mayoría de las mujeres no se dan cuenta que, aunque estemos teniendo sexo o haciendo deporte, nuestros cerebros están hechos de pequeñas cajas. Tenemos una caja para todo y cada una es independiente de la otra. Mientras que el cerebro de ellas, está hecho de una gran bola de alambre en la que todo está conectado con todo. Es como la súper carretera de Internet, y todo se mueve gracias a una energía a la que llamamos "emoción". Pero lo que no sabéis las mujeres es que nosotros tenemos una " caja de la nada". Es nuestra favorita. Ellas no entienden la “caja de la nada”, y eso las vuelve locas porque nada vuelve más loca a una mujer y la pone más irritada que ver a los hombres haciendo nada".
Puedo estar de acuerdo con lo de las emociones, nosotras sentimos intensamente. Pero creo que ellos también lo hacen, a su manera.
En mi opinión, se estructuran de otra forma. Son como las matrioskas, la originalidad consiste en que se encuentran huecas, de tal manera que en su interior albergan una nueva caja, y ésta a su vez a otra, y ésta a su vez otra. Y cada una de ellas contiene algo llamado "prioridades", pero es la caja suprema la que contiene las emociones y los sentimientos.
En la realidad, es raro que esas muñecas se pasen de veinte, pero en el caso de ellos: ¿hasta cuántas cajas puede llegar a tener su cerebro? ¡El reto está en descubrirlo!
¿En cuál de ellas está la líder? Aquella tirana que los manipula y no los deja que se expresen. Aquella que les infunde el miedo: " Esto es un Serio. Quien muestre primero sus emociones y sentimientos pierde. ¿De verdad quieres perder?”.
Vale que nosotras no entendamos que estéis sin pensar – no entiendo cómo lo hacen, si yo pienso incluso durmiendo- pero no es el hecho de veros no hacer nada lo que nos molesta. Lo que nos vuelve loca a más de una es no saber en qué caja estamos, si somos alguna de esas prioridades en su vida o cuándo llegará el momento de toparnos con la líder. De saber de una maldita vez si lleva mucho llegar a la cima o es un caso perdido.
PD: Cada espécimen debería llevar una fecha de caducidad en su embalaje, así al menos no iríamos tan perdidas.